¡Llegó el mes de mayo! Lo de la primavera, las flores, el amor y todo eso está muy bien, pero para nosotros, “mayo” es sinónimo de “Giro”. Esta prueba de tres semanas nos hace acordarnos de los duelos entre Coppi y Bartali o los triunfos de Merckx. También nos evoca los triunfos de Indurain o de los grandes ciclistas italianos como Ivan Basso o Vincenzo Nibali. En los últimos años nos ha hecho disfrutar con victorias como las de Quintana, Contador o Dumoulin y en esta edición se presenta con el atractivo de comprobar si Chris Froome será capaz de conquistar esta durísima prueba que cumple 101 años.
Serán tres semanas del mejor ciclismo que arranca hoy día 4 de mayo desde Jerusalén, en Israel, país que acogerá dos etapas más. El resto de la prueba se correrá íntegramente en territorio italiano. El Giro ya había comenzado en otras ocasiones fuera de Italia, pero ésta será la primera vez que lo haga fuera del continente europeo.
Los favoritos
Uno de los principales atractivos de esta edición será la participación de Chris Froome, que tras ganar Tour y Vuelta el año pasado, tiene como objetivo ganar las tres grandes competiciones de manera consecutiva. Son muy pocos los que han logrado algo así. Eddy Merckx, ganó 4 grandes vueltas consecutivas entre 1971 y 1973 (Giro 1972, Tour 1972, Vuelta 1973 y Giro 1973) y Bernard Hinault ganó 3 consecutivas entre 1982 y 1983 (Giro 1982, Tour 1982 y Vuelta 1983).
Sin embargo, la participación de Froome no está exenta de polémica. Durante la pasada Vuelta a España dio positivo en la 18ª etapa por una cantidad excesiva de Salbutamol, el medicamento que utiliza para tratar sus problemas de asma. El director del Giro, Mauro Vegni, ha pedido a las autoridades de la lucha antidopaje que resuelvan el caso antes de que dé comienzo la carrera, calificando de “desesperante” que después de tantos meses aún no se haya llegado a una conclusión.
El resto de los aspirantes a vestir la Maglia Rosa son de lo mejorcito del pelotón. Tom Dumoulín defiende título y dice estar tan preparado o más que el año pasado para revalidad la maglia. El italiano Fabio Aru ya sabe lo que es pisar el podio al terminar segundo en 2015, año en el que también conquistó la Vuelta a España. El colombiano Esteban Chaves fue segundo en 2016 y espera volver a su mejor nivel después de la caída que le obligó a retirarse de la Volta a Cataluña durante una bajada en Corbera de Llobregat. Otro colombiano que va a dar mucha guerra es Miguel Ángel López, que a sus 24 años ya sabe lo que es ganar dos etapas de la Vuelta o la clásica Milán-Turín.
El recorrido
La carrera dará comienzo en Jerusalén y terminará en Roma tras haber recorrido 3.546 km en 21 etapas, con 3 jornadas de descanso intercaladas.
Las tres primeras etapas se disputarán en Israel: la primera será una breve contrarreloj individual de 9,7 kilómetros y las otras dos serán más bien llanas y recorrerán ciudades como Haifa, Tel Aviv, Be’er Sheva y Eilat.
De ahí se pasará ya a tierras italianas, en un recorrido bastante montañoso pero, en general, equilibrado.
De las 21 etapas totales, 7 de ellas podemos considerarlas como etapas “llanas”. A las dos etapas de Israel se sumarán las llegadas a las ciudades de Praia a Mare, Imola (el final será en el circuito de automovilismo), Nervesa della Battaglia, Iseo y la etapa final de Roma.
Otras 4 etapas se consideran como de “media montaña”. Entre ellas destaca la décima etapa (entre Penne y Gualdo Tadino) que tendrá una longitud de 239km y será la más larga de todo el Giro.
Habrá 8 etapas calificadas como de “alta montaña” y como es lógico serán totalmente decisivas. En la sexta etapa se subirá hasta el Observatorio Astrofísico del Etna; en la octava se ascenderá el Lodrino a mitad de la etapa; en la novena se pasará por el macizo de los Apeninos con subidas a Roccaraso, Calascio y final en Campo Imperatore; en la etapa 14 se llegará a los Alpes italianos con 5 cimas puntuables y final en el Monte Zoncolan; en la 15 se llegará a los Dolomitas, con otras 5 ascensiones y final ascendente en Sappada; en la 18 se volverá a los Alpes con subida al Novello y final en el Prato Nevoso; la etapa 19 promete ser una de las mejores, con 181 km y 4 puertos (Colle del Lys, Colle delle Finestre, Sestriere y Monte Jafferau); la última etapa montañosa será la 20, segundo paso por los Alpes occidentales con subidas a Col Tsecore, Col St. Pantaleón y el último coloso, Cervinia, último obstáculo antes de la etapa final en Roma.
De las 2 etapas que se disputarán a modo de contrarreloj individual, la primera será la de Jerusalén y la segunda, en la etapa 16, llegará después de la dura etapa de los Dolomitas y tendrá un recorrido de 34,5 kilómetros. Será un terreno para especialistas, con rectas muy largas y carreteras anchas en las que la técnica y la aerodinámica podrán marcar la diferencia.
Conclusión
En definitiva, después de 101 años el Giro se mantiene en plena forma. Sigue siendo, por la dureza de su recorrido y por el prestigio de los corredores que la disputan, una de las mejores competiciones del mundo. Vamos a pasar grandes jornadas delante de la televisión este mes de mayo.
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